Ante la oleada de robos y hurtos que en los últimos meses están padeciendo numerosas fincas, explotaciones agropecuarias y casas de campo, desde ASAJA demandan una modificación del Código Penal, que ponga freno a esta lacra que están sufriendo agricultores y ganaderos de la provincia de Ciudad Real.
Este asunto se abordó el martes durante la celebración en Madrid de la Junta Directiva nacional de ASAJA, en la que representantes de la Organización de toda España coincidieron en la necesidad de endurecer las leyes para atajar “de una vez por todas” un problema que afecta a todas las zonas del país.
Unos treinta agricultores afectados, socios de ASAJA Ciudad Real de las localidades manchegas de Argamasilla de Alba, La Solana, Manzanares y Membrilla se reunieron en la noche del lunes en este último municipio para abordar esta problemática. El secretario general de ASAJA Ciudad Real, Florencio Rodríguez, también estuvo presente en la reunión, donde los afectados expusieron la situación.
Una representación de estos afectados mantendrá en los próximos días un encuentro con el subdelegado del Gobierno en Ciudad Real, Miguel Lacruz, y mandos de los Cuerpos de Seguridad del Estado, a los que expondrán la complicada situación que se está viviendo en el campo en los últimos tiempos, donde los robos se siguen produciendo a pesar del esfuerzo realizado desde la Subdelegación. Por ello, solicitarán una serie de medidas para evitar estos robos, así como mayor presencia policial en el campo y más controles.
En la mayoría de los casos, estos robos consisten en la sustracción de cable de cobre de las diversas instalaciones eléctricas, de gasóleo de los depósitos y de diverso material, como motores y grupos electrógenos. Además de la pérdida de estos materiales, los robos suponen en muchos casos un grave contratiempo para agricultores y ganaderos, que ven dificultadas y retrasadas sus labores diarias. Esta situación está generando una gran inseguridad en el campo, sobre todo, por la noche.