A los responsables del Aeropuerto de Ciudad Real no les basta con el aval de 140 millones de euros otorgado recientemente por el Gobierno regional (precisamente para asegurar los puestos de trabajo), ni con el continuo recorte de plantilla y jornada aplicado prácticamente desde su inauguración. Las previsiones de amortización y rentabilidad de la infraestructura deben ser tan desalentadoras que el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que será presentado en los próximos días por la sociedad pretende reducir durante un año prácticamente a la mitad (entre un 40 y un 45 por ciento) el importe que actualmente destina al pago de nóminas.
De este modo, el ERE afectará, probablemente, a la totalidad de la plantilla durante, al menos, un año, incluidos los directivos. Eso sí, en principio, se descartan más despidos. Tal y como trascendió ayer según informaciones de Europa Press publicadas en medios digitales, el expediente afectaría cada trimestre a unos 27 trabajadores de la compañía, que durante ese tiempo pasarían al paro. Asimismo, se prevé también que la totalidad de la plantilla sea objeto de una reducción de un 15 por ciento de jornada y sueldo. La enésima reducción para unos trabajadores que, en buena parte, ya vieron hace meses como su agenda laboral se reducía a media jornada.