Una cosa es que la crisis afecte, que afectará, al complejo petroquímico de Puertollano, y otra que Repsol planee su desaparición en la ciudad minera, algo que nunca ocurrirá. Éste ha sido el hilo argumental que el presidente de Repsol, Antonio Brufau, ha expuesto ante el presidente de Castilla-La Mancha, José Maria Barreda, durante la reunión que ambos han mantenido hoy en Madrid. Las notas de prensa remitidas por Repsol y Gobierno regional describen prácticamente un panorama idílico.
Según declaraciones de Brufau recogidas en una nota de prensa de Repsol, el complejo puertollanero “es un activo con gran valor estratégico para nuestra compañía, tanto por su localización como por el valor añadido que para Repsol generan sus actividades».
El presidente de Repsol expresó ante Barreda el compromiso de que la compañía seguirá apostando por su complejo industrial de Puertollano y despejó cualquier duda sobre el futuro de estas instalaciones, a la vez que garantizó que la compañía continuará generando riqueza en la comarca. “Todo ello más allá de las medidas concretas que en estos momentos de crisis se están teniendo que adoptar”.
Éstas, no obstante, no dejan de generar inquietud, así que tanto sindicatos como empresa tendrán que negociar ahora cómo se va a afrontar el cierre previsto de dos plantas, que afectará de forma directa a unos 90 trabajadores. Respecto al procesado de cracker, confirmó que se trabajará de forma discontinua con paradas cada tres o cuatro meses. Estas circunstancias no tienen por qué generar alarma entre las empresas contratistas, asegura Brufau, quien considera que Repsol sigue ofreciendo un gran volumen de trabajo.
Según la misma nota, Brufau recordó, además, que el Complejo de Puertollano es el más completo y con mayor capacidad de conversión de España, y que durante décadas ha venido llevando la delantera en inversiones a otros centros productivos de la compañía, como Bilbao o Cartagena, donde se están realizando actualmente inversiones para situarlos al nivel de Puertollano.
Como muestra de esta apuesta de futuro, Brufau recordó que en los últimos diez años la compañía ha invertido más de 850 millones de euros en el Complejo Petroquímico de Puertollano. Solo en el área química se han invertido cerca de 170 millones de euros en el mismo periodo. Además, se están invirtiendo 150 millones de euros en el nuevo oleoducto que se está construyendo entre Cartagena y Puertollano, que mejorará la integración del sistema de refino de la compañía.
“A causa de la crisis, estamos parando por algunos meses determinadas instalaciones, no solo en Puertollano, sino en varios de nuestros complejos productivos, para poder volver a ponerlos en marcha con garantías de futuro”, dijo Brufau.
Tras su reunión, Barreda y Brufau mantuvieron un encuentro con el alcalde de Puertollano, Joaquín Hermoso Murillo, y los representantes de las Organizaciones Sindicales CC.OO. y UGT, en el transcurso del cual el presidente de Repsol reiteró el compromiso de la compañía con Puertollano y su apuesta por su complejo industrial, a la vez que afirmó que el futuro competitivo del mismo requiere también del compromiso y esfuerzo de todos los agentes sociales.
Barreda, satisfecho
Por su parte, la nota de prensa sobre el encuentro remitida por la Junta de Comunidades también describe prácticamente un panorama idílico. Según ese documento, José María Barreda, mostró su satisfacción tras el “éxito” del encuentro. “En Castilla-La Mancha el único complejo que tenemos es el complejo petroquímico de Puertollano, y queremos potenciarlo y asegurar su futuro, ése era el objetivo de la reunión, y en la medida en que lo hemos conseguido quiero expresar mi satisfacción”, señaló el presidente, que verbalizó el compromiso del Gobierno regional con Puertollano y con Repsol.
En este contexto, el jefe del Ejecutivo autonómico aseguró que la conclusión del encuentro es que “Repsol en Puertollano tiene futuro”. “No debe haber preocupación ni entre los ciudadanos de Puertollano, ni entre los trabajadores de Repsol sobre el futuro de la empresa”, añadió el presidente, que aprovechó la ocasión para agradecer públicamente a Brufau su sensibilidad, disposición y colaboración “que se plasma en un compromiso muy concreto para asegurar ese futuro”.
Asimismo, Barreda expresó su agradecimiento a CCOO y UGT, por su compromiso con los intereses de la Región y por su trabajo velando siempre por el interés de los trabajadores y el interés general de Puertollano y de Castilla-La Mancha.
Tranquilidad y viabilidad
Según la misma nota de presa de la Junta, también los representantes sindicales manifestaron su satisfacción y tranquilidad tras el resultado del encuentro. Así, el secretario regional de CCOO en Castilla-La Mancha, José Luis Gil, indicó que la reunión celebrada era necesaria y muy útil porque «hemos hablado de inversiones de cara al futuro y nos da tranquilidad y viabilidad, y eso tiene mucho que ver con la preocupación de los trabajadores de Puertollano que ahora estarán tranquilos».
El máximo responsable de UGT en la región, Carlos Pedrosa, también recordó que el objetivo de las fuerzas sindicales es mantenerse en la certeza del mantenimiento y crecimiento del empleo de los trabajadores de Repsol.
Finalmente, el alcalde de Puertollano, Joaquín Hermoso, manifestó que el Complejo Petroquímico tiene futuro “porque hay compromiso de quien tiene que garantizarlo y porque tiene quien defienda ese futuro los sindicatos y las administraciones públicas”.
Críticas de la oposición
Quienes no están muy seguros de los resultados de la transcendente reunión son los responsables provinciales del PP. Hoy mismo, el diputado regional y secretario provincial del PP de Ciudad Real, Antonio Lucas-Torres, mostró la esperanza de la reunión de Barreda con el presidente de Repsol no sea “una simple foto para lavar la mala conciencia de alguien que no ha puesto, ni la voluntad, ni las medidas necesarias para que esto no hubiera pasado”, en referencia a la complicada situación que atraviesan los trabajadores de la petroquímica.
El dirigente político mostró el firme apoyo de los populares, asegurando que “hemos estado, estamos y estaremos con los trabajadores, así como con las empresas que indirectamente están viéndose afectadas por la situación”. No obstante, explicó que el PP no va a consentir que sean los trabajadores y estas empresas “las que paguen el pato de los que no han cumplido con sus obligaciones” y señaló que espera que de la reunión salga “lo que tiene que salir”, que no es otra cosa que inversiones para Puertollano y su comarca, ante la situación que están viviendo.
Además, Lucas-Torres confía en que el Gobierno regional tenga un plan estratégico de cómo ayudar a una de las empresas más importantes de Castilla-La Mancha porque, añadió, “no se toman soluciones después de que haya pasado lo malo. Imagino que habrá previsto un plan estratégico y habría previstas medidas para que esto no pasase y no se quedasen unas instalaciones obsoletas”. “Lo que sí me preocupa es que al Sr. Barreda no le he visto muchas veces con el máximo responsables de Repsol y sí a otros presidentes de otras comunidades autónomas poniendo la alfombra roja para que estas empresas lleguen hasta su región”, precisó.
“Espero que no nos birlen el pájaro y al final la empresa se quede en Puertollano y no vaya a otra comunidad autónoma”, afirmó el parlamentario regional, quien indicó que “sería algo triste”. Pero Lucas-Torres puntualizó que “sería más triste todavía ver que nos lo han birlado por dejación de funciones y porque no se ha actuado antes”.
