Natalia Menéndez, la nueva directora del Festival Internacional de Teatro Clásico de Almagro, prometió ayer «ganas, ideas, fe e imaginación» para afrontar una nueva etapa marcada por la crisis económica y lastrada por una preocupante deuda económica que El País cifró cercana al millón de euros.
«Vamos a derrochar imaginación, vamos a trabajar en esa línea, ya que el teatro es un espacio donde se imagina, sueña y lo intangible es mucho mayor que un billete o una moneda»- aseguró la nueva directora, que apostó con hacer del festival un «lugar de creación» y aseguró que habrá una buena programación en la que será la edición número 33 del Festival de Almagro.
Anunció Menéndez una nueva etapa de transición en la que se reforzará la promoción internacional del festival y se tendrá en cuenta a los jóvenes talentos y las nuevas formas de entender el teatro clásico, en referencia al cómic, el cine y el graffiti.