Los alumnos realizan rotaciones en fisioterapia respiratoria, plantas de hospitalización, fisioterapia, gimnasio principal, fisioterapia infantil, Unidad de Cuidados Intensivos, gimnasio de niños e hidroterapia, acompañados por un monitor.
Asimismo, asisten a seminarios y charlas acerca del uso de ortesis, bitutores, férulas, adiestramiento y manejo en la silla de ruedas, sorteo de obstáculos y conocimiento del sistema Lokomat.
Este año son nueve los alumnos de la ONCE los que han realizado prácticas, durante más de 80 horas distribuidas a lo largo de dos semanas. En este tiempo, siete chicos y dos chicas han realizado un recorrido por diferentes lugares estratégicos del centro.
El responsable de Fisioterapia del Hospital Nacional de Parapléjicos, Manuel Salinero, ha destacado la estupenda relación entre los alumnos y los profesionales del centro “que se desarrolla en un gran ambiente de camaradería y compañerismo”.
La relación docente entre el Hospital Nacional de Parapléjicos y la Escuela de Fisioterapia de la ONCE se remonta a 1985, fecha desde la cual año tras año los alumnos pasan un periodo de prácticas “muy enriquecedoras”, según Javier Sainz de Murieta, director técnico de la Escuela.
La Escuela Universitaria de Fisioterapia de la ONCE es un centro docente adscrito a la Universidad Autónoma de Madrid y cuya titularidad ostenta la ONCE. La formación de grado se realiza sólo para alumnos ciegos o con discapacidad visual, mientras que en la parte de postgrado está abierta a cualquier alumno que tenga el título de fisioterapeuta.
Según los estudios de integración laboral realizados por la Escuela, el 87 por ciento de los alumnos que han encuestado en los últimos cinco años estaban trabajando desde el primer año de terminar la Diplomatura.
El ámbito laboral de estos alumnos no es diferente al del resto de profesionales con la misma titulación, es decir, plazas en la sanidad pública y privada, pequeñas consultas de fisioterapia, residencias de anciano y en el terreno deportivo.