Esta zona del casco urbano rabanero será la próxima actuación de unas obras de infraestructura hidráulica que, como se ha podido comprobar fundamentalmente en el barrio de Cantarranas, están siendo decisivas a la hora de evitar las inundaciones que se producían con que apenas cayesen lluvias normales. La ausencia ahora de problemas tan significativos “no ha sido trabajo de un sólo día, sino que venimos trabajando en ello desde hace ya diez años, acondicionando las infraestructuras de nuestro pueblo para evitar estos problemas”, en palabras de Fernando Calso.
El alcalde recordaba a este respecto la renovación de la red con colectores adecuados a estos episodios o la sustitución progresiva que se viene realizando en los puentes del casco urbano, que ha alcanzado ya a dos de estas vías de enlace y que “de no haberlos cambiado, los problemas hubiesen sido muy muy graves”. También aludía a la limpieza que permanentemente ha llevado a cabo el Ayuntamiento en el cauce del río, previa autorización de la Confederación Hidrográfica del Guadiana, para evitar la pérdida de curso fluvial.
Una línea de trabajo en materia de infraestructuras que va a continuar este año, para lo cual se invertirán 203.125,86 euros del nuevo Fondo Estatal para el Empleo y la Sostenibilidad Local en el acondicionamiento del cauce del río Tirteafuera. Además del embellecimiento del entorno, lo fundamental se centrará en anular el último de los puntos negros como es éste sobre el que se ha estado tan vigilante en las últimas 48 horas. Dos técnicos de la CHG han examinado ya la zona con vistas a “elaborar el proyecto y ver por dónde atacar, pues queremos que con esta nueva obra no tengamos que hacer ya ninguna actuación de emergencia ante cualquier otra avenida de agua y haya un dique natural”, ha indicado Fernando Calso, añadiendo que también habrá un nuevo puente y se eliminará la pequeña y vetusta pasarela que hay ahí y que, como en este último caso, ha hecho también las veces de presa.
La principal causa de esta última y gran crecida del río Tirteafuera ha estado en las ingentes escorrentías de agua que se han originado en la sierra del oeste de la población, unos afluentes extraordinarios que han desembocado en el curso fluvial por mediación de dos arroyos que en él desembocan. Según explicaba el alcalde, el propio guarda rural del Ayuntamiento no había visto hasta ahora nada parecido en sus 25 años de servicio y por eso ha estado en permanente contacto con las autoridades municipales, dando así la voz de alarma con la suficiente antelación como para poder disponer en el casco urbano el operativo de emergencia que con tanta eficacia ha vuelto a actuar.
El alto grado de encharcamiento de la tierra, consecuencia del anterior periodo de tanta pluviosidad como el experimentado a finales de 2009 y durante el pasado mes de enero, ha originado estas grandes torrenteras que ha tenido que encauzar el río Tirteafuera. Esa misma causa ha provocado que algunas fincas rústicas sí se encuentren actualmente anegadas.