Cerca de 500 personas se dieron cita ayer en la presentación del libro elaborado este año, “El Carnaval de Herencia, sentimiento y tradición”, en el Patio del Ayuntamiento. En presencia de la delegada de Cultura y Turismo de Ciudad Real, Carmen Teresa Olmedo, el alcalde herenciano Jesús Fernández expuso la gran vigencia y sentimiento del Carnaval herenciano, y su fuerte raigambre popular, al tiempo que “lanzó el guante” a la representante de la Junta: “Sus peculiaridades y singularidades, y su acervo histórico, que se va renovando continuamente, nos llevan a solicitar el inicio de trámites para la Declaración de Interés Turístico Nacional, porque esta Fiesta de Interés Regional se merece más”.
Carmen Olmedo recogió el guante lanzado por el alcalde, y destacó el apoyo de las distintas administraciones, especialmente la Diputación Provincial, para la edición del libro, y puso en valor el carnaval herenciano donde tradición e innovación se dan la mano, destacando novedades este año como este libro, la exposición inaugurada el sábado sobre su supervivencia durante el franquismo, o el encuentro y hermanamiento de Gigantes y Cabezudos de nuestra región y Madrid.
En el acto intervinieron los autores del Libro, Antonio Martín Viveros, Juan Francisco Prado y Claro Manuel Fernández-Caballero, en presencia de la coautora y concejal de Cultura, Lola Fernández. Este interesante y trabajado documento cuenta con prólogo de Antonio Martín-Viveros Tajuelo, profesor de Historia Medieval en la Universidad Carlos III de Madrid. Y hace un recorrido por esta fiesta castellano-manchega en tres importantes apartados:
Un primer capítulo, de 1765 a 1939, que pone de manifiesto el mestizaje carnaval-ánimas, mezcla religiosidad y profana de las carnestolendas herencianas que burlaron las prohibiciones no sólo durante la guerra, sino en la dictadura de Primo de Rivera, y durante la República.
Otro segundo capítulo, con un primer apartado de 1939 a 1977, que habla del carnaval prohibido y disfrazado, que burlaba la censura y existía, gracias a la inteligencia de los herencianos y a la discreción de los alcaldes respectivos, que levantaban la mano para su celebración.
Y otro segundo apartado de este segundo capítulo, de 1977 a 2009, donde se pasa revista al Carnaval más popular, y reinventado, siguiendo la tradición de casi 250 años.
2.500 PERSONAS ARROPARON AL PERLÉ EN EL DOMINGO DE LAS DESEOSAS
Este domingo también se produjo el hermanamiento de Gigantes y Cabezudos de varias localidades manchegas y Madrid, concretamente Herencia, Alcázar de San Juán y Leganés.
Y, por la tarde, el deseo de carnaval se hizo patente, y el primer pasacalles del Carnaval, el del Domingo de las Deseosas, reunió a más de 2.500 personas entre desfilantes y público espectador. El Perlé, simpático herenciano, esta vez barbado, ataviado con un pijama a rayas y gorro a juego, se dedicó a “asustar con su látigo a los niños y niñas, con la complicidad de los padres”.
Sábado de los Ansiosos
Igualmente, el sábado anterior o más conocido como “Sábado de los Ansiosos” se abrió al público la Exposición “El Carnaval de Herencia durante el franquismo, supervivencia a una prohibición”, que permanecerá abierta durante todo el mes de febrero en la localidad, que pone de manifiesto como durante la dictadura siguió habiendo carnaval y los alcaldes tenían manga ancha al respecto, levantando la mano.
Y por la noche de este sábado pasado, más de mil jóvenes se dieron cita en la Plaza de España para saborear los primeros fuegos artificiales del Carnaval, y dar entrada al Domingo de las Deseosas.