Fernández, que ha visitado el humedal ciudadrealeño junto al secretario de Estado de Medio Rural y Agua del Ministerio de Medio Ambiente, Rural y Marino, Josep Puxeu, ha destacado la estrecha colaboración que han mantenido ambas administraciones para aplicar estas medidas ante la crítica situación por la que pasaba el Parque, con veinte hectáreas encharcadas y un incendio de turbas en su subsuelo, y que estas nuevas infraestructuras, pozos, bombeos, etc., serán útiles si en el futuro se produce un episodio similar al de los últimos meses.
A este respecto, la consejera ha reiterado que el futuro de las Tablas de Daimiel pasa por la adquisición de fincas y de derechos de riego en el entorno del Parque y por la aplicación del Plan Especial del Alto Guadiana para preservar el Acuífero 23.
Por su parte, el secretario de Estado ha relatado el conjunto de actuaciones que han permitido recuperar el Parque Nacional, que empezaron con la apertura de una serie de pozos para humedecer la turba y evitar la propagación del incendio, captaciones que han inyectado a Las Tablas hasta dos hectómetros cúbicos directamente desde el Acuífero.
A continuación, el Gobierno de España autorizó la utilización parcial, temporal y excepcional de la Tubería de la Llanura Manchega para hacer llegar hasta veinte hectómetros cúbicos de agua al Parque. Esta medida, puesta en marcha el pasado 4 de enero, ha asegurado la llegada de un caudal ininterrumpido de unos 900 litros por segundo a las Tablas de Daimiel.
Según Puxeu, con estas dos actuaciones estaba previsto inundar hasta setecientas hectáreas del humedal, ya que nadie contaba con las abundantes precipitaciones del último mes, que han hecho que el Parque haya empezado a recibir agua del Cigüela y que haya alcanzado una situación “optima”, con cerca de mil trescientas hectáreas encharcadas.
El estado en que se encuentran las Lagunas de Ruidera y el embalse de Peñarroya hacen intuir que el Cigüela seguirá aportando agua a las Tablas durante meses, razón por la que se ha decidido interrumpir la aportación de caudales al Parque a través de la Tubería Manchega. En total, se han aportado más de 2,1 hectómetros cúbicos de agua procedentes del trasvase Tajo-Segura y de los pozos existentes.