Con todo lo regido en Castilla-La Mancha, se fletará a finales de enero, principios de febrero, un avión que llevara a Haití estos bienes de primera necesidad.
El 12 de enero un fuerte terremoto de magnitud 7 en la escala de Richter sacudió Haití, el país más pobre de América y uno de los más pobres del mundo. Sumido en un caos institucional, la población se ha visto abandonada a su suerte. A 22 enero, el saldo provisional de víctimas mortales se calcula en más de 100.000, unas 250.000 personas necesitan ayuda urgente y se estiman en 3 millones el número de afectados.
Las autoridades haitianas calculan que un millón y medio de personas perdieron sus viviendas en el terremoto. Según el ministro del interior haitiano, Antoine Bien-Ai, se están preparando varios campamentos alrededor de la ciudad de Puerto Príncipe que albergarán unas 10.000 personas cada uno, hasta alcanzar los 400.000.
Estos campamentos y los haitianos necesitan de estas donaciones, pues no disponen de sábanas ni mantas para protegerse del frio, ni techo bajo el que refugiarse.