Además, durante la reunión de la Comisión de Explotación, a la que han asistido representantes del Gobierno regional, los representantes de la región de Murcia han manifestado que aunque la cuenca del Segura tenga excedentes, el campo murciano se riega con agua del Tajo porque así lo dice la Ley.
Para el Gobierno de Castilla-La Mancha, ha continuado Sánchez Pingarrón, esto demuestra que el criterio que tiene Levante “es que el agua del Tajo se regule desde Murcia y eso es lo que consideramos que no es posible mantener en pleno Siglo XXI y que requiere una modificación de las normas, ya que el agua la necesitamos en Castilla-La Mancha, tanto para nuestro abastecimiento como para nuestro desarrollo”.
El Gobierno regional quiere recordar, antes de que se decida la cantidad de agua a trasvasar, que el pasado 15 de octubre, durante una reunión de la Junta de Gobierno de la Confederación Hidrográfica del Segura, a la que asistieron representantes del Gobierno de Castilla-La Mancha, se puso de manifiesto que los caudales proporcionados por las desalinizadoras a la población del Segura han hecho que se invierta la tendencia sobre la dependencia de la cabecera del Tajo, ya que por vez primera eran mayores los recursos propios que los procedentes del trasvase, recursos que han aumentado con las últimas lluvias.
