La OMIC recuerda que la venta en rebajas no supone una merma en la calidad del producto. Esta información es necesaria para que el consumidor tenga un perfecto conocimiento de la reducción que se produce en el precio de los bienes y no en la calidad. Se recomienda a los ciudadanos que exijan la factura o tique de compra, cuya entrega es obligatoria ya que es necesario a la hora de reclamar. Se recuerda también que no existe ninguna normativa que permita a los comerciantes rechazar las devoluciones de los productos comprados en rebajas si estas son aceptadas durante el resto del año, salvo que el producto esté defectuoso, según explica la técnico de Consumo, Silvia Valiente.
Tarjetas de crédito
Los establecimientos que admiten tarjetas de crédito el resto del año tienen la obligación de hacerlo también en este periodo de ventas. También se recomienda no dejarse seducir por la publicidad, evitar las compras compulsivas y planificarlas previamente y adquirir aquello que realmente se necesite, si quiere evitar sobresaltos de última hora. Para ello, hacer una lista, no abusar de la tarjeta, observar que las etiquetas indican el precio rebajado junto al anterior, comprobar que la calidad es la misma que fuera del periodo de rebajas y tener en cuenta que la publicidad es como un contrato vinculante forman parte de las sugerencias básicas.
En definitiva, el consumidor debe observar las indicaciones expresas para la época de rebajas, preguntar si admiten devoluciones, guardar el tique de compra, examinar bien el objeto de la compra antes de pagarlo y, ante cualquier irregularidad, intentar resolver el problema amistosamente. Si no se logra, se pedirán las hojas de reclamaciones en la que se hará constar su queja. También pueden presentarse en la OMIC.