Según Carmen Casero, el Gobierno socialista de Castilla-La Mancha es lo mismo que “una brutal subida de impuestos para los ciudadanos, un incremento del paro para Castilla-La Mancha, por encima de las cifras y porcentajes del resto de España, una caída de la competitividad sin parangón, aumento de los gastos superfluos –y en este sentido, recordó cómo el PP ha denunciado un Gobierno obsesionado por la propaganda y los fotoplanes –“.
De ahí, que Carmen Casero demandó “un Gobierno Regional que esté con los ciudadanos, que se baje del coche oficial y esté con esas casi 190.000 personas que están en situación de desempleo, frente a un Gobierno que asiste como convidado de piedra al cierre de empresas en Castilla-La Mancha y se dedica a ahogar a la clase media”.
De ese gran número de parados, Casero destacó el 14.2 % de desempleados jóvenes, 27.137 parados “que ven negro el futuro de esta tierra, una comunidad a la que han robado el futuro, con 110 personas que se van al paro cada día”.
Frente a esta postura de Barreda, “el PP está con los autónomos, con las pequeñas y medianas empresas, y creemos que con el presidente socialista Barreda, nuestra tierra lo va a seguir pasando muy mal, porque no sabe cómo acometer las reformas necesarias y más importantes para Castilla-La Mancha”, argumentó Casero.
Asimismo, la diputada popular mostró sus expectativas ante este 2010, “el último año de Barreda, porque el PP ganará las próximas elecciones de Castilla-La Mancha y se volcará en resolver los problemas de los ciudadanos, estando con ellos, no como Barreda que, desde un coche oficial, obvia e ignora los asuntos que más preocupan a esta tierra, el primero de ellos, el paro”.
Por otro lado, la portavoz de la Comisión de Salud y Bienestar Social en las Cortes Regionales, se refirió a la petición que realizó el sector de comerciantes de la región de haber adelantado el período de rebajas a primeros de enero, petición ignorada por la Junta de Castilla-La Mancha . Según Casero, “ha sido una nueva torpeza del Gobierno socialista, una muestra de que no quieren ayudar a los comercios de nuestra tierra, a las pequeñas y medianas empresas y así aliviar la mala campaña que están teniendo, incrementando las ventas en esos primeros días de enero. Frente a las reivindicaciones de un sector que lo está pasando tan mal, el Gobierno de Barreda ha vuelto a hacer oídos sordos”, concluyó Casero.