Los agricultores no aguantan más. Están tan cansados de vender sus productos por debajo del coste de producción y que a nadie le importe un pimiento, que podrían mandar todo a freír espárragos. Tan mal está la cosa de los precios que hasta el presidente de la asociación agraria más importante se apellida Barato. Así que ASAJA repartió este miércoles 6.000 kilos de sandías, melones, patatas y cebollas en pleno centro de Ciudad Real. Como de costumbre, los ciudadanos que disfrutan de sus merecidas vacaciones, los cada vez más numerosos parados y los jubilados, hicieron su agosto. Que aproveche, convecinos.
Este campo es una ruina
Artículo anterior
Artículo siguiente
