Manifestamos nuestro acuerdo en la búsqueda de soluciones pero también dijimos, y decimos, que contra los rumores lo mejor es la información seria, veraz y rigurosa. La información que se ha venido dando es confusa, oscurantista, preocupada más por intereses partidistas que por mostrar la verdad. Después de esta actuación del Gobierno, creemos que ahora es el momento de EXIGIR:
• Preocupación y demandas:
La representación sindical de CSI•F en la Caja de Castilla –La Mancha, ha mostrado su preocupación y demanda la estabilidad laboral de los trabajadores, cualificados profesionales, que no pueden pagar las nefastas consecuencias de tan desastrosa gestión.
No aceptaremos medidas traumáticas y defenderemos un empleo estable y de calidad para más de 3.000 trabajadores en nuestra Comunidad Autónoma. CSI•F velará por el mantenimiento de puestos de trabajo ahora y en el futuro.
• Explicaciones veraces:
Que se explique con claridad, por quién proceda: el Sr. Hernández Moltó, los administradores que se nombren, los responsables políticos, o que lo investigue la Justicia, la casuística que ha llevado a esta situación: qué inversiones, qué proyectos, qué créditos, cuantía, condiciones, motivos y beneficiarios, que han podido incidir en este ruinoso desastre.
• Responsabilidades:
Que se pidan, y se cumplan, responsabilidades a quiénes han llevado de esta situación, en el ámbito de la dirección de la entidad, creemos que la responsabilidad del Sr. Moltó no se resuelve con su cese, y en el ámbito político, por dejación de responsabilidades o por influencia en las actuaciones que hayan podido favorecer a determinados ámbitos financieros o empresariales.
– Exigimos responsabilidades políticas porque consideramos que tendría que haber una Ley de Cajas reformada para que regularice y haga más democráticos estos instrumentos financieros que pueden ser utilizados arbitrariamente con parámetros políticos, más cerca de intereses partidistas que de los de los ciudadanos.
Tampoco hemos de olvidar que los grandes créditos, a partir de ciertas cantidades, son supervisados, estudiados los riesgos, precisan el placet, de la Consejería de Economía y Hacienda y eso supone una importante responsabilidad que ahora no se puede eludir. Hay que saber qué créditos son éstos, quiénes son los perceptores, que proyectos han atendido y la relación con responsables políticos, si la hubiera.
– Esperamos que, quiénes se han de preocupar por los asuntos que afectan a la sociedad castellano-manchega, y este es muy grave, no dejen de pedir las responsabilidades que hubiera lugar y se esfuercen en dejar al descubierto a los autores y colaboradores de este fiasco; es preciso que los ciudadanos conozcamos la verdad, sin la menor reserva.
– El presidente Barreda tiene delante un grave problema, tiene que estar a la altura de las circunstancias, tiene que dar “la talla”, tiene que dar respuestas veraces y claras y pedir y asumir responsabilidades. Así se lo pedimos y esperamos que también se lo exijan las fuerzas políticas y sociales; no nos conforma que el Banco de España ponga dinero, de todos, para salvar las graves responsabilidades de tan desastrosos gestores, de sus beneficiados y de sus mentores políticos, no puede hacerse cómplice de tan nefastos gestores.