José Valverde (Consejero de Educación)
En la actual sociedad de la información y la comunicación, plural y democrática, los bienes públicos deben ser accesibles, deseables, útiles y funcionales. La educación es el bien público fundamental que debe ser ofrecido a toda la ciudadanía de manera integral, para satisfacer las necesidades y los intereses de todas las personas, en todos los ámbitos de su desarrollo individual y colectivo.
La sociedad de Castilla-La Mancha tiene claro que sembrar educación en un campo bien labrado y bien abonado es garantía de buena cosecha.
Labrar y abonar el campo educativo con programas como la gratuidad de los libros de texto, la construcción de nuevos centros, la mejora del transporte, la ampliación del número de comedores, el Plan de Lectura, la extensión de la enseñanza de idiomas, la dotación de nuevas tecnologías, el extraordinario desarrollo de los servicios de orientación, el permanente aumento de profesorado, el acuerdo social por la convivencia, la apuesta por la innovación educativa, el impulso a la Formación Profesional o la transversalidad de la atención a la diversidad, por citar sólo algunos programas, es la línea de actuación que nos lleva a enriquecer entre todos nuestra tierra.
Creemos en la educación como un proyecto de vida colectivo compartido, que facilite la integración cultural y social y asegure la cohesión social. Favorecemos un sistema educativo respetuoso con los diferentes credos, culturas y tradiciones, justo en la distribución de oportunidades y recursos y con capacidad para facilitar la convivencia y el enriquecimiento intercultural desde el respeto, el conocimiento y la reflexión, que permita la integración de las diferencias y la lucha efectiva contra las desigualdades.
Por eso, queremos seguir haciendo hincapié, durante el presente curso, en la convivencia, pues la propia afirmación de la voluntad de trabajar juntos por la convivencia escolar, con cuantas medidas se precise, basadas en el diálogo, la participación y la negociación, es afirmar que trabajamos por unas relaciones sociales efectivas y solidarias.
La convivencia tiene valor en sí misma pero es, además, el primer factor que posibilita la calidad educativa que favorece la extensión del éxito escolar, en el que estamos empeñados tanto la Administración como las familias, el profesorado y el propio alumnado.
Durante este curso vamos a seguir esforzándonos por impulsar la calidad y la mejor atención a los alumnos y las alumnas y al profesorado. Y por hacer crecer, como hasta ahora lo hemos conseguido, año tras año, el rendimiento escolar de nuestro alumnado y las tasas de titulación.
Es cierto que nuestra región sigue creciendo en alumnado y, por séptimo año consecutivo, habrá también un incremento neto de profesores y profesoras. Son ya 5.534 los nuevos profesores incorporados desde el curso 2000-2001 hasta hoy. Así mismo, es cierto que nuestro profesorado, mediante la aplicación del Acuerdo de mejora retributiva, se sitúa entre los mejores pagados de Europa, según el último Informe de la OCDE.
También vamos a seguir entre las Comunidades Autónomas que mayor esfuerzo inversor realiza en Educación en términos de PIB (4’6%). En los presupuestos de 2007 se contempla la propuesta de un aumento del 12% que nos va a permitir un incremento y una mejora notables de las infraestructuras y de los equipamientos, y una ampliación de los servicios complementarios, esenciales para garantizar el derecho a la educación.
Este curso debe marcar la pauta de lo que va a ser el desarrollo educativo en Castilla-La Mancha, pues va a ser el curso del comienzo de la aplicación de la LOE y, por tanto, el que va a poner el marco esencial de una educación estable, en la que nosotros debemos aprovechar la circunstancia para ofrecer más y mejores oportunidades y establecer el currículo propio de la Comunidad, que será nuestra seña de identidad, y el desarrollo normativo que conlleva nuestra autonomía.
Actuar en un ámbito tan importante y complejo requiere un elevado grado de consenso entre la comunidad social y los profesionales de la educación, pues ahí, con su reconocimiento, apoyo y estímulo, reside la piedra angular del edificio educativo que entre todos estamos construyendo y ofreciendo a Castilla-La Mancha.