Tomás Mañas (Consejero de Bienestar Social)
Simbolizan la voz de la experiencia, personalizan la paciencia que nace del saber esperar; son la cara de la comprensión, surgida de haber conocido situaciones semejantes; y recrean, como casi ninguna otra figura, un cariño y un amor ya exento de vehemencia pero no de emoción: son los abuelos, esas personas tan cercanas y de las que todos hemos disfrutados. Esas figuras sin las cuales nuestra infancia y adolescencia nunca sería la misma.
A todos ellos, a esas personas mayores que nos han legado su trabajo, su esfuerzo y su sacrificio para que hoy podamos vivir en una sociedad y un mundo mejor, más solidario y más avanzando, la ONG “Mensajeros de la Paz” ha querido dedicarles esta jornada declarándola “Día del abuelo”, una celebración a la que todos nos adherimos como muestra de respeto y reconocimiento a todas las personas mayores de Castilla-La Mancha.
Unas personas mayores que no sólo han aportado el trabajo de toda una vida, sino que aún ahora siguen enriqueciendo nuestra sociedad a través de distintas iniciativas como el voluntariado social, una actividad en la que centenares de mayores de 65 años hacen de la solidaridad con los demás una constante en su vida.
Una solidaridad que ha contado con el apoyo del Gobierno regional, que subvenciona aquellas actividades e iniciativas que se llevan a cabo desde las asociaciones y centros de mayores.
A todas estas personas que por razones de edad han dejado sus obligaciones laborales, centrando su interés por causas y actividades altruistas, quiero mostrarles mi agradecimiento en nombre de todo el Gobierno de Castilla-La Mancha por toda una vida de trabajo, y una jubilación activa, dinámica y solidaria.
Y no hay mejor muestra de agradecimiento que el trabajo que desde la Junta de Comunidades se lleva a cabo para ampliar y mejorar la red de asistencia a las personas mayores, con el fin de asegurarles una atención de calidad y acorde a lo que ellos demandan.
Por eso, durante los últimos cuatro años el Gobierno regional ha incrementado en un 80% el presupuesto destinado a este colectivo, lo que ha supuesto que hayamos ampliado los programas de ayuda a domicilio, que beneficia actualmente a más de 20.000 personas mayores.
También, los programas de alojamiento y atención residencial han experimentado un importante impulso, si tenemos en cuenta que serán más de 7.000 plazas pública residenciales las que estarán a disposición de los mayores de Castilla-La Mancha a finales del presente año; sin olvidarnos tampoco de aquellas iniciativas destinadas al ocio de este colectivo.
En definitiva, este Gobierno quiere ser el instrumento de la sociedad castellano-manchega, para conseguir que nuestros mayores puedan disfrutar de un presente de bienestar.