Pudiera tratarse de la grabación de un anuncio publicitario o de alguna película, pero es difícil saberlo. En todo caso, el primer objeto volador que ha utilizado el Aeropuerto de Ciudad Real después de su adjudicación provisional a la empresa CR International Airport S.L es un zepelín que parece filmar desde las alturas las operaciones que transcurren en la pista aterrizaje.
Por el momento se desconoce la naturaleza de estas operaciones. Como ha sido habitual durante la grabación de anteriores spots y películas, el acceso al aeropuerto ha quedado prohibido y el personal a cargo se niega a dar cualquier tipo de información.
Es el mismo velo de misterio que rodea la compra del Aeropuerto desde el momento en que el titular del Juzgado de lo Mercantil de Ciudad Real, Carmelo Ordóñez, diera a conocer el pasado mes de abril la adjudicación provisional de la infraestructura a la empresa CR International Airport S.L por 56,2 millones de euros. La provincia de Ciudad Real y media región siguen preguntándose qué proyectos se reserva y quién está detrás de la sociedad que se ha ganado las preferencias del magistrado, y que ahora tiene de plazo hasta el 1 de septiembre para abonar el total del precio de la infraestructura aeroportuaria.
Hasta la fecha se conocen muy pocos detalles de la empresa que podría hacerse a precio de ganga con una infraestructura en la que se invirtieron unos 600 millones de euros, si bien todo apunta a que podría tratarse de una mera sociedad “intermediaria” cuyos verdaderos inversores siguen entre bambalinas.
Según señala el magistrado en el auto de adjudicación provisional, CR International Airport prevé una inversión de 579 millones y una creación de 7.716 puestos de trabajo directos e indirectos en diez años. No obstante el Boletín Oficial del Registro Mercantil publicaba el pasado mes de mayo la constitución de la empresa Grupo Orden CR 16 SL con el objeto social de desarrollar “actividades anexas” al transporte aéreo y de contabilidad en las instalaciones del Aeropuerto de Ciudad Real.
El socio y administrador único de Grupo Orden CR 16 es el ciudadrealeño José Luis Lara Ruiz de la Hermosa, quien también figurara como administrador único de una de las empresas que pujó en un primer momento en la subasta y, posteriormente, optó a la compra de la infraestructura: el murciano Grupo Orden 12. En principio, esta empresa pretendía instalar un centro de inspección técnica de aeronaves.
