Santos G. Monroy.- La crisis está tambaleando hasta los más sólidos castillos empresariales. Hace apenas un lustro era impensable que Obras Aconsa SL, una de las habituales adjudicatarias de obra pública en Puertollano, tuviera que afrontar un concurso de acreedores. Pero eso es precisamente lo que ha ocurrido hoy mismo, con la publicación en el BOE del auto de declaración de concurso voluntario de esta empresa de Picón que participó, directa o indirectamente, de los más emblemáticos proyectos del ex alcalde Joaquín Hermoso Murillo: el parque del Terri, el colector de la calle Gran Capitán, la urbanización de la segunda fase del polígono La Nava o el Centro de Servicios Municipales de la barriada Fraternidad.
El Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 4 y de lo Mercantil de Ciudad Real ha dictado auto de declaración de concurso voluntario ordinario de Obras Aconsa, S.L y en consecuencia ha acordado que las facultades de administración y disposición sobre su patrimonio queden intervenidas por la administración concursal designada al efecto: la mercantil ciudadrealeña Latorre y Vegas Economistas-Auditores, S.L.P. Igualmente se ha acordado el llamamiento de los acreedores para que comuniquen a la administración concursal la existencia de sus créditos.
La declaración del concurso marca un punto de inflexión en la trayectoria de la empresa piconera, todo un clásico en la adjudicación de obras del Ayuntamiento de Puertollano a largo de la última década, ya fuera en solitario o formando unión temporal de empresas (UTE).
Precisamente en UTE con Imesapi (fruto de la fusión de las empresas Api e Imes, ambas pertenecientes al grupo ACS), Aconsa fue concesionaria de numerosas obras en la ciudad minera: la UTE Api-Aconsa fue, por ejemplo, la encargada de las obras de ejecución de colector de la calle Gran Capitán, o de la urbanización de la segunda fase del polígono La Nava. Como UTE Imesapi-Aconsa, estas empresas se encargaron de la construcción del Centro de Servicios Municipales de la barriada Fraternidad.
Aconsa también estuvo vinculada a las polémicas obras de construcción del parque del Terri ya que, si bien no se presentó al concurso (la actuación fue adjudicada a Imesapi), sí figuró como peticionaria de un estudio geotécnico realizado por la empresa Euroconsult.
Ya se nos ha ido el amiguete y chapamos. Este es el empresariado patrio… y así nos va.