Entrevista con Fermín Gassol, director de Cáritas Ciudad Real (I): «La crisis ha generado pobres limpios, personas que antes colaboraban y ahora son destinatarias de ayudas»

Santos G. Monroy.- Posee la civilizada sencillez del hombre culto enganchado a las alegrías y miserias de lo cotidiano. Fermín Gassol Peco es un luchador de la dignidad, y un filósofo del pueblo que no se casa con nadie, salvo con sus ideales de justicia y solidaridad. Este jubilado de la banca, y colaborador de Miciudadreal.es, ha sido recientemente nombrado director de Cáritas Diocesana de Ciudad Real. Con él hemos charlado sobre sus funciones al frente de esta institución, y sobre las luces y sombras que la depresión socioeconómica arroja sobre la capital y provincia. Esta es la primera parte de la entrevista concedida a este digital.

Fermín Gassol (arriba, en el centro) con un grupo de trabajadores y voluntarios de Cáritas Diocesana de Ciudad Real
Fermín Gassol (arriba, en el centro) con un grupo de trabajadores y voluntarios de Cáritas Diocesana de Ciudad Real

Pregunta.- Director de Cáritas diocesana de Ciudad Real… ¿Qué responsabilidades se esconden bajo este puesto?

Respuesta.- Como expresión de lo que este puesto de director diocesano de Cáritas, o de cualquier voluntario significa, siempre digo que es un honor, un privilegio y una Gracia servir a los que más nos necesitan. Entender esto en profundidad, no es cuestión fácil. Detrás de mi «puesto» en concreto, existen responsabilidades de distintos carices. Al explicarlas, aprovecho para dar a conocer nuestra, «estructura» y «filosofía de vida», que no es otra que la de Jesucristo hacia los desheredados de este mundo y que recoge el capítulo quinto del Evangelio de San Mateo.
La responsabilidad de Director Diocesano según el art. 32 de los Estatutos, presenta dos vertientes. La primera lo es hacia el exterior: ostenta la representación legal de Cáritas ante todos los organismos públicos y privados.Es el responsable ejecutivo de todas las acciones de Cáritas Diocesana, que en nuestro caso coincide con la provincia. Es la parte que podríamos llamar menos evangélica, más prosaica, pero necesaria porque estamos incrustados en una sociedad civil de la que formamos parte.
La segunda responsabilidad es la que hace referencia a la labor dentro de la entidad. Según los Estatutos, el director diocesano es el responsable de dirigir y llevar a buen puerto las orientaciones del Consejo Diocesano, a quien debe dar cuentas de su gestión.
El régimen de Cáritas es asamblerario. Es la Asamblea la que traza las directrices y cuestiones a desarrollar cada tres años. El Consejo Diocesano, formado por 16 miembros, en el que tienen cabida los once arciprestazgos, el equipo directivo (delegado, director y secretario), un trabajador y un voluntario, es el órgano encargado de velar por el cumplimiento de estas tareas encomendadas por la Asamblea. La responsabilidad del director diocesano es pues la de pilotar Cáritas…

P.- Pilotar Cáritas… ¿Y con qué tripulación?

R.- En nuestra provincia hay 65 Cáritas Parroquiales en los once arciprestazgos. En las poblaciones con varias parroquias existen las figuras de las Cáritas Interparroquiales, con su equipo directivo, que realiza la función de coordinación de las distintas parroquias de esa localidad. La entidad fundamental en Cáritas es la parroquia, porque es en ella en donde se lleva a cabo de manera directa el servicio a los más necesitados, la diakonía, ministerio fundamental de la vida cristiana.
En nuestra Diócesis mantenemos también cinco centros de atención, y tres pisos tutelados que cubren distintas necesidades. En Alcázar se encuentra el Centro Samaría que junto con el de Jericó en Ciudad Real y Virgen de Gracia en Puertollano atienden a los transeúntes, además de desarrollar distintos programas de corta duración. Para aquellos que están inmersos en programas de rehabilitación y poder reintegrarse a la sociedad y al mundo laboral, tenemos en Daimiel La Casa de Abraham. Y para aquellos que están atrapados por los estupefacientes, el Centro Siloé.
He de reseñar que en el día de La Merced, Instituciones Penitenciarias ha reconocido la labor de este centro de Cáritas en las prisiones de Alcázar y Herrera, otorgándonos una medalla en un emotivo acto celebrado en Herrera. Ambos directores me han dicho que este galardón está concedido como reconocimiento a nuestra labor social y para contribuir a que la sociedad lo sepa, detalle que les he agradecido enormemente.
Se trata por tanto de un entramado amplio y muy complejo, en el que se dejan la piel cada día 70 trabajadores y más de mil cien voluntarios. Un equipo humano que el director debe saber gestionar, porque tanto trabajadores como voluntarios somos puros medios para lograr un fin, que es velar por la dignidad de los más desfavorecidos de la sociedad.

P.- ¿Ha cambiado el mapa de la pobreza en Ciudad Real desde el año 2008, con la llegada de depresión socioeconómica?

R.- Por supuesto que sí, aunque no de igual forma en toda la provincia. En el plano asistencial podemos decir que la atención se ha triplicado o cuadruplicado en algunas poblaciones. En la labor promocional, nosotros seguimos desarrollando nuestros diez programas como siempre hemos hecho. La labor promocional en Cáritas es mucho menos conocida y algún día, si tienen a bien, comentaré en qué consisten con más detenimiento. Pero les anticipo que toca a los distintos sectores más en precario de la sociedad.

P.- ¿Cómo es ser pobre en Ciudad Real? ¿Cuál es la realidad de las familias que acuden a la institución?

R.- En general y hablo siempre desde mi perspectiva que es diocesana, ser pobre aquí es muy parecido a serlo en otros lugares. Es decir, no tener lo necesario para vivir. ¡Ojo!, no tener menos cosas, sino no tener casi ninguna, o ninguna. No tener que comer, un techo donde descansar… o una persona con quien hablar. Es aquí donde Cáritas trabaja. Existen sectores o colectivos más vulnerables a la crisis y a la pobreza a los que atendemos desde los distintos programas.
Pero la pobreza más triste y descorazonadora para una familia es aquella que incide en los hijos. Para un padre, como es mi caso, esto es lo más doloroso… con mucha diferencia. La mayor pena para unos padres y la más vergonzante para una sociedad es ver como los hijos que ha engendrado no tienen que llevarse a la boca y no tienen futuro. Resulta tremendo si nos paramos a pensar un poco en ello. Este es un gravísimo pecado social.
Existe por otro lado una realidad nueva con la crisis que son los pobres limpios, aquellos que se han encontrado de la noche a la mañana con una situación de desamparo. Personas que antes colaboraban y ahora son los destinatarios de las ayudas.
De todas maneras, quiero dejar un leve sabor dulce en esta pregunta. Cuando más pequeño es el lugar donde se vive, más fácil es lograr sobrevivir en tiempos de crisis. La frialdad y soledad que existen en las grandes ciudades, aquí creo que no llegamos a tenerlas. Existen otras organizaciones, como el Banco de Alimentos que cubren también de manera bastante efectiva estas carencias tan primarias.

P.- Cáritas recibe financiación de la propia Iglesia y de las administraciones públicas pero… ¿La llegada de la crisis nos ha hecho ser más solidarios? ¿Hay más donaciones de particulares?

R.- Sin duda alguna. El aumento de donativos particulares, nominales y anónimos se ha multiplicado de una manera, muy, muy notable. Podríamos hablar que estamos ante otro escenario mucho más solidario. El manchego es una persona sencilla y solidaria. En los distintos pueblos existen constantes iniciativas en este sentido. La última, dentro de unos días, se va a realizar en Saceruela con una subasta solidaria, pese a que en ese núcleo de población no tienen este problema.
El perfil social de nuestra provincia es muy solidario, porque el número de habitantes en cada población no es lo suficientemente grande como para que existan conciencias aisladas y soledades infranqueables. Siempre acabo hablando de solidaridad porque es el único camino que tiene la sociedad para acabar con esta vergonzosa situación.

P.- ¿Y las empresas? ¿Son solidarias las empresas de Ciudad Real?

R.- Bueno, en Cáritas tenemos, como no puede ser de otra manera, la confidencialidad como norma sagrada. Los empresarios son personas que aportan sus donativos como otros ciudadanos. Sin embargo nosotros no entregamos un cartel para que sea expuesto en los escaparates de sus empresas o negocios. Eso es diametralmente opuesto al espíritu de la Caridad. Quiero decir con esto que son las personas y no las estructuras las que donan.

P.- ¿Responde el voluntariado ciudadrealeño a la llamada de Cáritas?

R.- Siempre lo ha hecho. Y siempre también desde los distintos estratos sociales. La vocación de voluntario en Cáritas es para todos los creyentes que tienen el sentido ineludible para un cristiano de la entrega al prójimo que más nos necesita. Actualmente el número de voluntarios es de 1.113, lo que demuestra la concienciación que existe. En este mismo año se han realizado en nueve localidades distintos cursos de voluntariado al que han asistido 148 personas. El curso es necesario para saber si quien desea pertenecer a Cáritas tiene el perfil, es el lugar que va buscando o su vocación es otra, parecida pero distinta. Los voluntarios que superan el curso son distribuidos según su perfil en los lugares en los que desarrollar su labor. En la cárcel, en los centros de acogida, con los drogodependientes, o en las parroquias.

P.-  ¿A cuántas personas ha atendido Cáritas Ciudad Real en lo que llevamos de año y cuántos recursos destina anualmente para ayudarlas?

R.- Esta pregunta va de números y ahí están:
11.792 personas atendidas a través de los distintos programas de una manera individual. No cuentan aquí las asistencias comunitarias. El número de ayudas personales ascendieron a 45.428 el pasado año. Decir que estos números tienen rostro y que para nosotros cada persona y cada ayuda tiene un valor absoluto.
Los recursos económicos de Cáritas Diocesana de Ciudad Real fueron en el año dos mil doce de 3.485.828,86 euros. Si doy estas cifras tan exactas es porque las tenemos. No olvidemos que en Cáritas estamos auditados. Por este hecho y porque sabemos lo delicado de nuestro cometido, la transparencia en la gestión económica debe ser como el cristal. Nosotros manejamos dinero ajeno y la claridad en la gestión ha de ser inmaculada.
Dicho esto decir también que el origen de los fondos en 2012 se ha percibido en un cincuenta y cinco por ciento de ayudas públicas y un cuarenta y cinco por ciento de donativos particulares.

Relacionados

11 COMENTARIOS

  1. Me ha gustado la entrevista y sobre todo la sencillez y honradez de Fermín.
    Cáritas es sinónimo de «caridad» y eso dentro de la Iglesia «comulga» con sus ideas pero a mi me gusta y prefiero la palabra «solidaridad». Creo que la caridad se ejerce de arriba abajo, es decir, desde el que tiene al que no tiene; en cambio la solidaridad es horizontal al menos como yo la entiendo así.
    De todos modos conociendo a Fermín creo que la horizontalidad es lo que prima en él.
    Ahora que hay nuevo Papa y con unas connotaciones no se si llamarla de izquierdas o simplemente cristianas, a ver que pasa…
    Espero la segunda parte de esta entrevista.
    Un abrazo Fermín.

    • Gracias Luis Mario. La solidaridad es el único camino para arreglar este desaguisado. La caridad, que para un cristiano no es paternalismo limosnero sino amor sin límite,presupone lo primero, pero lo supera. La cuestión está en estar enamorado del ser humano. Un fuerte abrazo solidario, amigo.

  2. Hola Fermín, como ya imaginarás, soy ateo de profesión. Pero, me he leído de cabo a rabo la entrevista y DESTILA sentido común a raudales.

    Por otro lado, aunque las fotos no huelen, esta que ha puesto MCR huele a buena gente a la legua.

    Os deseo lo mejor, porque sé que estáis haciendo un labor que no os corresponde (que debería estar cubierta por la administración gracias al mandato de los ciudadanos, pero ya sabes, lo que votamos es algo muy diferente a lo que nos imponen, sean del gobierno que sean).

    Y, si alguien de alguna empresa, o que aún le quede algo de dinero para ser solidario, me apunto a ser de los que digan que este equipo de la foto -sin conocerlos personalmente- seguro que va a exprimir cara euro en pro de los que lo necesitan.

    Enhorabuena!!!

    • Creo que coincidimos en lo de «ateo»…en muchas facetas. Yo también soy «ateo» de muchísimas cosas. Solamente creo en el hombre, mefiguro que como tú, y en Jesucristo, en el Hombre como ser Trascendente. Un fuerte abrazo.

      • Jejeje, me apunto también a tus ateísmos. Pero, en ese caso, ateísmos activos. Que, aunque muchas veces nos equivoquemos o nos pasemos de frenada en nuestros comentarios, no buscan otra cosa que despertar la conciencia de los ciudadanos para que todos tengamos acceso, aunque sea a las migajas del welfare state que nunca llegó de verdad a España y que países como Holanda dan por finalizados en 2013.

        Qué rabia Fermín. Cómo me fastidia llegar tarde a las fiestas….Porque esta empezó después del crack del 29 en Occidente, pero nosotros estábamos a punto de comenzar aquella historia de 40 años de retraso respecto al mundo «civilizado» y que todavía sirve de argumento a los que no quieren mirar adelante.

        Seguiré animándote y felicitándote y dando caña por estos foros, ya que vosotros sois, por desgracia, las migajas -término que uso con el máximo respeto- de la fiesta de la que hablábamos antes. Como has dicho en tus respuestas, ahora, aquellos que invitaban a barra libre son clientes de Cáritas, y eso es tremendo.

        Mucha fuerza, mucho ánimo y muchas ganas de guerrear por los que lo necesitan. Estoy convencido de que todos los que por aquí pululamos nos quitamos el sombrero.

        • Blisterr, tienes una virtud. Tus argumentos,son difícil y la mayoría de las veces innecesariamente rebatibles. Además tienes un estilo literario…brillante. Un saludo afectuoso.

  3. La pobreza no conoce de limpios o sucios, simplemente es una lacra y Cáritas hace una gran labor pero que preferiria que un dia desaparezca cuando la miseria se erradique. En cuanto a los empresarios decir tan solo que hacemos lo que podemos: ni somos Repsol ni Cepsa, simpelemente comerciantes que trabajamos en jornadas interminables y simplemente sobrevivimos. La demagogía trabajador – empresario hay que borrarla del mapa,a mi me gustaría ser empleado de banca.

ESCRIBE UN COMENTARIO

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí


spot_img
spot_img
spot_img
spot_img
spot_img